San Cristóbal -o cariñosamente conocida como San Cris- es la ciudad que más me ha gustado de mi viaje por México. Y eso que casi en cada visita me daba un malestar estomacal con retortijones y diarrea que sólo conseguía quitarme con té de hierbabuena. Esta ciudad me ha enseñado lo valioso, vital y llenando el estómago puede ser un desayuno de plátanos y bizcochos. Ah, y por supuesto, té de hierbabuena 😀
Bromas aparte. Aparte de mi malestar estomacal -también lo tendrás, para que lo sepas 😀 😛 – a todos que viajan a San Cris los pasa: hay algo mágico en esta ciudad. Estoy casi segura de que es algo diferente para cada persona. Para mí, fue el mercado y las calles serpenteantes que dan a esta pequeña ciudad un sabor de pueblo. La panadería francesa cerca del centro y el ambiente festivo, igual saber que San Cris es una de las ciudades más turísticas de México, pero también se encuentra en el estado más pobre de México (Chiapas). Lo que personalmente encuentro fascinante. Así que para mí, la pregunta de si San Cris es sí, no o tal vez es innecesaria. Absolutamente. Te lo pierdes si no vas. 😊