Hay algunas cosas que me gustan especialmente cuando viajo. Entre ellas, los miradores. Me encantan los miradores. Prometo que si hay un mirador en un lugar, iré a él el 99% de las veces. El uno por ciento se limita a cuando hay varios y entonces decido cuáles merecen más la pena.
Para ser sincero, este mirador no parece absolutamente nada porque no es especialmente alto y está situado en el límite entre dos playas y simplemente no destaca. Yo también estuve a punto de pasar de largo. Pero… Como estaba de excursión y, para ser sincero, el mirador estaba simplemente en mi camino por las playas, subí los escalones.
Dicen que nunca hay que juzgar un libro por su portada, ¿no? La vista desde allí arriba es absolutamente fantástica para la altitud relativamente baja en comparación. Yo mismo me sorprendí. Claro, usted no tiene una vista perfecta, pero básicamente se obtiene una especie de visión general de una parte de Playa Zicatela. Como una perspectiva diferente. ¿Sinceramente? ¡Es mega!

Así que te aconsejo lo siguiente: Ya que definitivamente terminarás cerca de Playa Principal, ¿por qué no subes las escaleras hasta el mirador? Al menos si vienes de Playa Zicatela – el tesoro escondido se encuentra entre las dos playas.