Una vista fantástica de Chacahua y una puesta de sol hermosa. En pocas palabras, eso es lo que hay que saber sobre el mirador de Chacahua.
Yo misma encontré el mirador por casualidad, porque en primer plazo vine a Chacahua por la playa. Pero hacia el atardecer un grupo grande se puso en camino hacia algún lado y cuando les pregunté a dónde iban, me dijeron <<para ver el atardecer>>. Como la bioluminiscencia sólo hay cuándo ya es obscuro, me uní y junto a ellos crucé en lancha a la otra isla. De ahí se sube por un sendero corto y ligeramente empinado y voilà, ya estás.

El mirador consta de una plataforma y un faro. Y la vista es… sinceramente espectacular. Por un lado se puede ver el mar abierto, donde el sol se pone lentamente. Al otro, el sinuoso sistema de manglares con grandes extensiones de agua entre ellos. Abajo, entre las zonas de agua y la playa, se ve un mar de manglares y palmeras. Es… realmente hermoso. Y el atardecer es uno de los más especiales que he visto en todo México. Verdadera y honestamente uno de esos lugares que no se olvidan. Especialmente no con esta vista – incluso se puede ver la neblina asentándose sobre el dosel alrededor de Chacahua. Es realmente fascinante.
¿Ir o no? Te pierdes algo si no lo haces durante tu estancia en Chacahua. Personalmente, hubiera subido todas las tardes si hubiera estado más tiempo en Chacahua.